Turismo y sus distintas miradas

El turismo es una práctica que se da desde tiempos remotos. En la antigüedad el destino era uno de los principales motivos para emprender un viaje. Grandes batallas, colonizaciones y expediciones, marcaron la vida y el obrar de guerreros como Aquiles, Paris entre otros, que para ese momento de la historia fueron los principales viajeros, y lugares como Itaca o Troya, los destinos turísticos de aquel entonces, pero tras motivaciones atadas a la misión más que al deseo o al interés. Luego con posterioridad a la Segunda Guerra Mundial, se ocasionan otro gran número de desplazamientos, que sumados a los anteriores, dados por motivos de conquista y expansión, traen aquí también la inquietud de qué hacer cuando se llega a un lugar nuevo.

Turismo y ocio irán de la mano, el primero con un enfoque principalmente económico y el segundo con una orientación marcadamente social, pero que sumados el uno y el otro, han dejado otros asuntos sobre la mesa. Geografía del Turismo, Tecnología, Sociedad de la Información, Globalización, Libertad de Mercados, Patrimonio, Cultura, Identidad, Biodiversidad y Sostenibilidad, son solo unos de tantos temas que confluyen cuando se habla de dicha práctica. 

No basta solo con pensar como lo afirma la Organización Mundial del Turismo, que se entiende por éste como una actividad efectuada por cualquier persona, que decide salir de su zona de residencia cotidiana por un período. El deseo de salir, el trasladarse a otro lugar, bien sea por días, meses o hasta un año, conlleva emociones, motivos, expectativas, anhelos, consumos, tendencias y otros tantos más aspectos, que permiten que exista un sistema turístico y que al interior de sí, transcurra una persona que a medida que acumule viajes, puede terminar por juntar más millas que Aquiles o Paris, incluso, convertirse en un modelo de Marco Polo contemporáneo.

La historia ha mostrado no solo personajes que la han tejido en el tiempo, sino caminantes y aventureros que han ocasionado innumerables significados tras su andar. Por ello se ama el camino, por ello se es andariego, al paso, descubrimiento más descubrimiento y con ello la magia del asombro, por ello también se viaja y se seguirá viajando mientras exista vida.

Colombia es un destino turístico que engloba muchos intereses y anhelos cuando se le quiere conocer en un viaje. Y es que nuestro país, ubicado en la zona noroccidental de América del Sur, es un completo encanto y para muchos desconocedores de nuestra tierra, un tesoro por descubrir. Millares de recursos culturales dan cuenta de su riqueza cultural y natural, de su identidad y su patrimonio.

Historia, monumentos, cocinas tradicionales, música desde géneros autóctonos como nuevos ritmos, variedad de instrumentos, carnavales, ferias, festivales, arte urbano, artesanías, etnias, relatos, escritores, artistas, eventos, un promedio de 87 etnias, frutas exóticas, ríos, páramos, paisajes naturales que te roban el aliento, ruralidad y café, son un conjunto de miles de miles de razones por las cuales el destino turístico es Colombia.

En el país a lo largo y ancho de su territorio y de su geografía, se construyen dinámicas e interacciones también alrededor del turismo. No en vano se dice que somos muy felices a pesar de cualquier tipo de circunstancia, pues venimos con un pasado a cuestas que hemos sabido sobrellevar con gallardía, pues además, tenemos una capacidad de regeneración tal, que posiblemente se obedece al arraigo a la identidad, al deseo de hacer empresa, al deseo de llevar el país de la mano de una buena mirada del desarrollo.

El desarrollo por su parte del Turismo Sostenible, busca conciliar a turistas y anfitriones alrededor del destino turístico. Y es que, en ocasiones, como es mi caso, gusta más la palabra viajero que no turista, cuando se piensa en un contacto adecuado con la cultura local, cuando se agradece el recibimiento y hospitalidad de quien reside en el terruño. Pensar y actuar en óptica de Turismo Sostenible, es también viajar de manera responsable y a conciencia.

Conscientes del paisaje que se conoce, de sus recursos naturales y culturales, de su gente, de su biodiversidad y autenticidad. Emprender viajes así, es hacerlo en línea de tiempo que evoluciona y se sostiene, es lograr hacerlo en perspectiva de pasado, presente y futuro. En horizonte de respeto por la otredad, de conocimiento y redescubrimiento, de significación, emprendimiento, innovación, de consumo responsable y de tratamiento adecuado. Eso también es viajar.

La opinión expresada en esta entrada de blog es de exclusiva responsabilidad de su autor y no necesariamente reflejan el punto de vista de Pacto Global Red Colombia.